Saltar al contenido
  • Perfil
  • Novedades
  • Publicaciones
  • Fotografías
    • América Latina
      • Argentina
      • Bolivia
      • Brasil
      • Colombia
      • Ecuador
      • México & Guatemala
      • Perú
  • Videos
  • Enlaces
  • Mapa de sitio
  • Contacto

Los túneles de Paraná: Estudios de arqueología y arquitectura

Deja un comentario

Arqueología y Arrquitectura de Paraná

El artículo «Los túneles de Paraná: Estudios de arqueología y arquitectura» realizado por Daniel Schávelzon, Patricia Frazzi y Guillermo Paez es el primero de los artículos del informe presentado en junio de 2005 a la Comisión de Estudio e Investigación Histórica de los conductos abovedados bajo el suelo de la Ciudad de Paraná, provincia de Entre Ríos (República Argentina).

I. Antecedentes

En función de la formación de una Comisión para el estudio de los túneles históricos de la ciudad, en base al decreto del Intendente Municipal de Paraná nro. 7115/04, la cual designó a los abajo firmantes con el objeto de hacer un peritaje que permitiera arrojar nueva información sobre un viejo y polémico tema de la comunidad paranaense. Esta decisión se tomó sobre la base de la existencia de otro decreto anterior, el 467 del 6 de marzo de 1992. Esto dio lugar a un Decreto (no. 349) para la formación de una comisión al efecto basado en la Ordenanza 7459 de 21 de febrero de1992 que decía “Créase la Comisión de Estudio e Investigación Histórica de los conductos abovedados bajo el suelo de la ciudad de Paraná”. En el año 1997, por Decreto 926 se volvió a integrar la Comisión.

Si bien era desde antiguo evidente la existencia de construcciones subterráneas diversas, como la cisterna de aljibe encontrada en la plaza 1ro. de Mayo, de su similar en la Bajada de los Vascos al Puerto Viejo y otras dispersas por la ciudad, existía una fuerte polémica acerca de la existencia de túneles aun más antiguos –atribuidos a los jesuitas que cruzarían la ciudad por su subsuelo-. Esto ha generado largas polémicas imposibles de reseñar aquí, de las que trataremos de mantenernos al margen hasta tener una evaluación propia de la situación.

Gracias a esta invitación se hizo un viaje durante los días 18 y 19 de mayo, durante los cuales efectuamos un recorrido general por la ciudad, se vistaron diversas estructuras bajo tierra, se contactaron diferentes historiadores, arqueólogos, ingenieros, arquitectos y personas interesadas en la temática, se recabó gran cantidad de información al respecto y se hizo un relevamiento preliminar de dos estructuras, el túnel de Coceramic y la bóveda del golf del Club Estudiantes.

II. Hipótesis establecidas para el estudio

Fue el interés mayor de esta designación el responder a dos preguntas muy concretas, aunque no bien explicitadas, que podemos sintetizar de la siguiente manera.

– de cuándo son estas construcciones

– cuál fue su función o propósito

Si bien las preguntas eran muchas, todas rondaban alrededor de estas dos principales las que se convirtieron por ende en nuestras hipótesis de trabajo. Este informe intenta, en forma preliminar, responder a dichas preguntas, sin más expectativas que eso.

A estas dos hipótesis les sumamos otra, surgidas desde nuestro propio interés como especialistas en patrimonio cultural:

– cuál su valor patrimonial y cómo aprovecharlo

III. Metodología

En función de las preguntas tan concretas que la Intendencia a través de su Comisión especial en la materia nos hacía, se decidió establecer una metodología de trabajo basada en la arqueología de la arquitectura.

Esta disciplina ha sentado un nuevo concepto metodológico para el relevamiento e interpretación de estructuras y construcciones de valor patrimonial, entendiendo que en las acciones sobre el patrimonio histórico y arquitectónico, deben participar equipos interdisciplinarios compuestos por arquitectos, arqueólogos, historiadores, restauradores y técnicos que trabajen en forma conjunta con el objetivo de llevar a cabo intervenciones científicas, acordes con las potencialidades reales y con la historia de los bienes sobre los que se va a actuar.

Por lo tanto, el método adoptado consistió en ordenar y datar las etapas por las que han pasado los edificios hasta llegar a su estado actual, analizando todos los elementos que los componen y que se les agregaron o quitaron, según las distintas acciones y procesos constructivos o destructivos que han sufrido.

De este modo a través de una minuciosa observación de las construcciones, llegamos a reconocer los cambios menos visibles: los distintos materiales empleados, sus dimensiones, las técnicas constructivas, la ornamentación, las huellas de las herramientas utilizadas, etc. Estos datos nos han permitido realizar una primera aproximación para comprender los procesos constructivos, las distintas etapas, las fechas y los criterios seguidos por los constructores para realizar las obras, utilizando registros de fichas, gráficos y fotografías.

Es decir, que, pese al poco tiempo disponible, hemos podido desarrollar una serie de observaciones sobre la materialidad de los objetos que nos presentaban e intentar responder a los requerimientos que se nos plantearon, con un análisis de las técnicas constructivas, de los materiales usados, la tipología arquitectónica y el material histórico contextuado. Se ha evitado adrede utilizar fuentes documentales en esta primera etapa de investigación. Esto, lógicamente, le da a los resultados un carácter primario, pero consideramos que es suficiente antes de intentar una nueva aproximación más detallada.

IV. El Túnel de Coceramic

La construcción visitada es una galería bajo tierra ligeramente curva (Sector B) que consta de tres secciones, que en el dibujo denominamos 1 a 3; cabe ser destacado que para este análisis no podemos desvincular esa galería del canal o entubamiento a cielo abierto por el que se accede (Sector A). Por lo que hemos visto todas las discusiones hasta la fecha no han tomado en cuenta que ambas construcciones son una misma y están indisolublemente enlazadas para su estudio. Es evidente que se trata del relicto de una quebrada o zanjón muy transformado por la acción del hombre en virtud de los muchos cambios operados encima de él, en el barrio de Pueto Viejo. Toda explicación del túnel pasará, en el futuro, por entender el proceso de cambio ocurrido en el sitio como totalidad.

Sector B, Sección 1

La galería propiamente dicha (Sector B, sección 1) es un túnel hecho bajo la ladera del cerro que posee cerca de 40 metros lineales de desarrollo. Está construida con muros de piedra canteada trabajada con herramientas metálicas y pegadas con una mezcla que usa cemento además de cal, y el cemento está en altas proporciones dándole rigidez e impermeabilidad. Los muros sostienen una bóveda hecha de mampostería de ladrillos. El piso es de piedra trabajado de la misma manera que los muros, aunque el escurrimiento de agua constante ha desgastado las juntas. Existe un único escalón visible –aunque es difícil que hubiese otros no visibles por el relleno-, de 15 cm de altura, ubicado a 6.25 metros del inicio de este Sector.

Vista del sector B1 en su tramo principal

Vista del sector B1 en su tramo principal

Las dimensiones internas, bastante estandarizadas, son de un metro de ancho, 85 cm de alto y 40 cm de altura de la bóveda. Dada la gran cantidad de escombro en el interior resulta imposible saber con certeza si la altura se mantiene estable hasta el final, o al menos hasta el sitio donde deja de ser accesible, pero pareciera que hay una leve disminución a medida que se penetra. Los ladrillos de la bóveda son bastante homogéneos midiendo en su mayoría 29 x 14 x 4 cm.

La bóveda y muros han sido construidos en este tramo en tres partes, juntas que se ven con todo detalle y se marcan en el dibujo, especialmente en la bóveda, indicando etapas diferentes o simples cambios de mano de obra, o son el resultado de un sistema constructivo que luego se establece como hipótesis.

La galería desemboca en la parte posterior en un área rellenada con escombro moderno; pese a eso puede verse que la bóveda está rota, lo que puede ser interpretado de dos maneras, al menos hasta ahora:

1) un área donde se venció el techo hundiéndose la tierra de encima (por acción natural o humana)

2) que allí comience un tiro vertical por donde se arrojó el escombro

Desagüe al interior del túnel, aun en funcionamiento.

Desagüe al interior del túnel, aun en funcionamiento.

Sea cual fuere la hipótesis que se acepte, la idea de que la galería continúa por detrás es factible, aunque no probable; la única forma de comprobarlo es quitando el escombro, protegiendo la bóveda para que no continúe cayendo, y mirar atrás. No es un problema grave y es factible con bajos costos.

Debe tomarse en cuenta que la hipótesis de que haya un tiro vertical se base en:

1) historia oral local publicada y aceptada

2) que los ladrillos de la bóveda en ese sitio están redondeados en el extremo, indicando un desgaste parejo (están redondeados en su extremo) que pareciera ser intencional y parte de la obra misma

3) no se observa la continuación de las paredes ni de las hiladas inferiores de ladrillo de la bóveda más allá de un metro desde el sitio taponado (aunque es muy difícil observarlo)

No es necesario decir que haya o no un tiro vertical, puede o no continuar la galería, aunque lo consideramos poco probable.

Durante el trayecto de la galería (Sector B, únicamente en la Sección 1) hay desagües en sus muros. Estos desagües, conductos o albañales son de diferentes formas, tamaños y sistema constructivo, aunque homogéneos y coherentes entre sí y el túnel. Sus diferencias hablan de sistemas constructivos diferentes en función de su tamaño y lugar de salida, incluso posiblemente hay pequeñas diferencias cronológicas entre ellos.

De lado oeste hay tres conductos, del lado norte hay uno sólo. El desague del Este es el mayor y mide 30 x 60 cm, está apoyado y terminado de forma tal que muestra haber sido hecho junto con el muro mismo, tiene forma, declive y dimensiones coherentes con su función actual de conducir agua. Los ubicados del otro lado son menores, dos de ellos incluso mucho más chicos y uno de ellos de cerca de 30 metros de largo, es el que conduce los fragmentos de tejas y ladrillos –y agua- de la fábrica Coceramic que se haya ubicada encima. Los muros de este conducto son de piedra, cortada de la misma forma que en los muros de la galería, se utilizan también ladrillos y, la entrada desde la fábrica muestra que ha sido hecho todo en una sola etapa constructiva. No hay duda que su función fue y es la de escurrir agua, aunque ahora se la aproveche para todo tipo de basura. Los otros dos conductos menores, de ladrillos muestran que fueron puestos en forma simple, rompiendo los ladrillos del extremo, los que no están trabados a la piedra; incluso un conducto tiene una curvatura ascendente antes de salir a la galería y su extensión en profundidad es de cerca de 20 metros. Esta curva terminal no hubiera impedido el desborde del agua, pero resulta al menos extraña. En al menos un desague los ladrillos usados miden 35 cm de largo.

En un sector indicado en el plano como lugar de excavación se hizo un pequeño sondeo arqueológico donde se obtuvieron varios fragmentos de objetos –loza, vidrio, cerámica y metal-; la totalidad de ese material es del siglo XX.

Detalle de un desagüe construido con posterioridad al túnel.

Detalle de un desagüe construido con posterioridad al túnel.

Unión original de ladrillos y piedras

Unión original de ladrillos y piedras

Detalle de la unión entre la piedra y el ladrillo en B2.

Detalle de la unión entre la piedra y el ladrillo en B2.

Entrada a uno de los desagües originales del túnel desde la fábrica Coceramic.

Entrada a uno de los desagües originales del túnel desde la fábrica Coceramic.

Sector B, Secciones 2 y 3

Son los dos sectores de “entrada” a la galería más extensa, también abovedados pero claramente diferentes a ésta. Los ejes de orientación están desfazados y, como se ve en el esquema adjunto, han girado hacia el norte unos pocos grados por lo que no tienen ángulos rectos en sus esquinas. Incluso la unión del B-2 con la galería no es simétrica ya que esta no está centrada.

La Sección 2 mide 2.87 metros de ancho, está totalmente construida en ladrillos salvo las dos hiladas inferiores y su piso, éstos miden 32 cm de largo, las juntas están claramente hundidas y gastadas y tuvo un revoque que se ha caído por efecto de la humedad. La piedra es la mejor trabajada de todo el conjunto mostrando un perfecto escuadrado. La sección 3 está hecha con ladrillos de máquina, industriales, con la junta ligeramente saliente, como es habitual en casi todo el país para este material, repitiendo el patrón tradicional inglés. El piso, en sus sectores de cemento es más reciente, aunque el canal de ladrillos que conduce el agua hacia fuera parece antiguo y coincidente con la época de la construcción. Resulta imposible excavarlo por el escombro y el agua constante.

En síntesis, estos dos tramos son diferentes entre sí, técnica y cronológicamente, y a su vez diferentes de la galería más larga con la que no coinciden ni siquiera en orientación.

Unión asimétrica de dos galerías de diferente cronología aunque con similar técnica constructiva

Unión asimétrica de dos galerías de diferente cronología aunque con similar técnica constructiva

Sector A

Este largo canal abierto, que mide cerca de 44.50 metros, resulta de extremo interés aunque por desgracia en fecha reciente se modificó una de sus paredes y el piso, haciéndolos y hormigón; posiblemente su estudio hubiera explicado todo el conjunto y su historia. No es recto sino que tiene al menos dos quiebres marcados y la pared que conserva intacta es de piedra. Esta fue hecha con sillares de perfecta manufactura, unidos también con un mortero que usa cemento en fuerte proporción. Mide cerca de 3.50 metros de alto y posee dos docenas de desagües similares a los existentes dentro de la galería. Ubicados a diferentes alturas hay desde 20 cm de lado hasta uno abovedado de 95 cm de altura, ubicado a 40 cm del piso del canal.

En síntesis, este muro reproduce en sistema constructivo y funcionalidad el interior de la galería aunque fue hecho a cielo abierto. Hoy en día hay un enorme caño metálico que conduce agua de una vertiente de arriba del cerro. El agua llega a la barranca y por caída natural sale al río.

El contexto del túnel

Como cualquier análisis arqueológico debe tenerse muy en cuenta el contexto. Y para ello hay que considerar que Paraná es una ciudad de una topografía altamente irregular, que esta es una bajada de un cerro y que los manantiales que escurren desde arriba, que suponemos que fueron muchos más en el pasado, son y han sido un problema. El arroyo Antoñico cercano, a donde desemboca este sistema, no ha variado su curso sino sólo sus bordes y al menos en lo que puede ser observado todo el sistema de desague de la ladera no ha variado al menos desde que la fábrica se instaló en el sitio hace un siglo.

Hipótesis y conclusiones

Material arqueológico del siglo XX rescatado del sector B1 del túnel.

Material arqueológico del siglo XX rescatado del sector B1 del túnel.Material arqueológico del siglo XX rescatado del sector B1 del túnel

Material arqueológico del siglo XX rescatado del sector B1 del túnel

* Funcionalidad: creemos que el conducto es una galería de desague y que fue hecha con esa función, la que mantiene hasta hoy. Basamos esto en lo siguiente:

– La existencia de manantiales naturales en el cerro, incluso hasta la actualidad, que necesitaban desaguar sin caer libremente por la barranca abrupta; incluso hoy hay que conducirlos para evitar desmoronamientos

– Los desagües de mampostería internos a la galería, idénticos a los de la parte exterior, fueron construidos como una unidad con la galería aunque con diferentes técnicas y con ligeras diferencias de tiempo; es decir que son parte integrante desde el inicio, no son agregados

– El sistema constructivo es racional, lógico y coherente con esta función en todos sus detalles; la presencia de un escalón o desnivel no resulta extraño sino por el contrario, coherente con el sistema constructivo que luego describimos

– Los conductos ahora secos, los de menor tamaño, debieron quedar fuera de uso al hacerse nuevas instalaciones sanitarias en la parte superior del cerro y sus edificios, o fueron cancelados por acción u omisión, o simplemente se secó el manantial que allí desaguaba

– Las dimensiones del conjunto resultan razonables para lo que se conoce en todo el país para este tipo de obra y son las mínimas adecuadas para el trabajo de gente en su interior en la construcción primero y en su limpieza más tarde. Coinciden con la bibliografía existente en la materia para túneles bajo tierra para movimiento de agua

– Las diferencias de todo tipo entre las tres secciones implican épocas y técnicas diferentes aunque emparentadas; su explicación es aun compleja pero en principio pensamos que son ampliaciones de la boca, más amplias precisamente por ser el lugar donde la tierra se deslavaba, y que posiblemente se derrumbó, por lo que fue necesario hacer galerías cortas en dos oportunidades. De diferentes anchos y altos, para resolver el problema.

– El sector a cielo abierto se inicia precisamente cuando el desague sale del cerro, y controlando el desnivel no fue necesario hacer una galería cerrada

– Aunque más difícil de comprobar por los cambios que le ocurrieron al tramo B-2 en su parte superior, esta puede ser poco anterior a todo el conjunto, como haber sido la base de un puente sobre el barranco que formaba el arroyo o manantial aun no entubado, y que luego quedó como parte de la galería aunque más grande

* Cronología

– Sistema constructivo

El sistema de construcción es tradicional en los sistemas sanitarios del siglo XIX, con piso y muro de piedra y bóveda de ladrillo, en dimensiones lógicas para el movimiento humano en el canal mayor; los accesos han sido colocados algunos en la construcción misma de la galería y otros son posteriores, casualmente los menores. Los dos tramos delanteros son diferentes, de materiales y sistema constructivo, además de dimensiones, y corresponden a momentos claramente diferentes. Es un tipo de galería habitual de observar en los libros dedicados al tema en el siglo XIX e inicios del XX, aunque si bien es cierto que pueden ser anteriores, la presencia de cemento en las juntas lo hace sumamente improbable.

– Funcionalidad

El sistema ya descrito es un complejo desague de los manantiales del cerro, función que creemos para la que fue hecho y que sigue cumpliendo a la perfección

– Secuencia constructiva

El inicio de la historia de esta galería, y lo planteamos a nivel de hipótesis, es un manantial importante que fue creando lentamente su propio paso bajo tierra, un pequeño canal principal al que se le unían otros menores, al menos dos. Este salía al aire libre formando un barranco, igual que hoy, que desembocaba en el río cercano.

Posiblemente al hacerse obras más importantes de arquitectura en la parte de arriba fue necesario regular ese sistema de desagües, en especial los pluviales, para evitar que lavara el cerro. Cuando se decidió construir la galería para facilitar un desague general para los varios menores que caían libremente o salían en forma abrupta más abajo, se hicieron las obras mayores. Consideramos que el túnel fue construido de una sola vez en su trayecto principal, aunque en varias etapas: la más antigua es el Sector 1 de la Sección B (es decir la galería principal), hecha en partes junto con los albañales mayores de desague. Para hacerlo se hizo una galería de mayores dimensiones que la actual, con poca habilidad por cierto ya que para encontrar la caída mayor de agua fue necesario hacer una ligera curvatura al fondo. Este manantial bajaba en forma relativamente vertical y coincide con lo que creemos el inicio del túnel.. Mientras se colocaban las piedras de los muros se hicieron los desagües, lo que luego fueron terminados algunos un poco burdamente; no hay evidencia de que las paredes se hayan abierto con posterioridad para hacer estas obras. Es posible que se pensó que el techo abovedado podía terminar en los sitios en que se cortó su obra, pero seguramente hubo que seguir y eso explica las juntas aun a la vista. Que se trata de una obra coherente en sus materiales, estructuralmente única y hecha en una sola operación, creemos que no hay duda alguna, al menos en función de lo que se pudo observar en esta corta visita.

La presencia de al menos un albañal hecho con mampostería de mayor tamaño (hasta 35 cm de largo) apunta a la posibilidad de que ya hubiera un canal en el lugar

Aquí surgen dos posibilidades: que los arcos de entrada (B-2) y (B-3) hayan sido precedentes –por ejemplo puentes- o que en algún momento posterior a la construcción de la galería se produjeran derrumbes en la boca, al deslavarse la tierra, y fue necesario hacer una nueva boca (la B-2), más grande porque ahora el ancho a cubrir era mayor; y al mayor ancho le correspondió una mayor altura, lo mismo sucedió con la orientación que fue necesario modificarla para ajustarla al canal externo que, por cualquier motivo hoy imposible de saber, se había modificado ligeramente. Si fue así seguramente lo mismo volvió a suceder en la tercera parte (Sector B-3). Queda dilucidar este detalle en un futura oportunidad y con mayor documentación en mano.

El porqué de los materiales diferentes hay dos respuestas posibles: o es anterior como ya sugerimos, o si es posterior se reusaron en B-2 ladrillos más antiguos por tenerlos disponibles en el sitio, cosa normal en este tipo de obras municipales.

Detalle constructivo mostrando la unión entre B2 y B3

Detalle constructivo mostrando la unión entre B2 y B3

Evidencia de la construcción simultánea del muro en B2

– Fechamiento

Si bien los datos con que se cuentan son contextuales, constructivos, arqueológicos y no documentales, es posible atribuir un fechamiento cercano a 1880 para el Sector B-1, de 1860-1870 para el B-2 si es precedente al otro y 1890-1900 para el B-3. Es posible que todo el conjunto pueda moverse en el tiempo un poco hacia atrás, con mayores estudios, aunque el tramo hecho con ladrillos de máquina difícilmente haya sido posterior al año 1900 y anterior a 1880; al igual que no creemos posible que haya habido acceso a cemento Pórtland antes de 1850, al menos en esas cantidades.

Por supuesto, estos fechamientos son tentativos y necesitan mayores observaciones y estudios.

Imagen de la fábrica Coceramic de 1930 donde se observa la compleja topografía sobre la que está construida

Imagen de la fábrica Coceramic de 1930 donde se observa la compleja topografía sobre la que está construida

– Valor patrimonial y potencialidad

Es evidente que esta estructura tiene un MUY ALTO VALOR PATRIMONIAL y puede ser abierto al turismo con una muy baja inversión municipal. Por supuesto debe ser limpia, iluminada y el agua debe tener un canal por donde circular; y el acceso público debe estar regulado por cuestiones de seguridad. Resto es independiente de la fecha de construcción o las polémicas que genere, es de por si un atractivo patrimonial interesante; al que si se le mantiene el agua circulante puede ser una vista hermosa.

Sugerencia del equipo: que un grupo de arquitectos del Municipio haga un proyecto de puesta en valor, calcule el valor de este trabajo y que Turismo establezca un proyecto para su uso junto con la cisterna de la Baja de los Vascos.

VI. Estructura subterránea del golf del Club Estudiantes

En el lugar conocido como Golf del Estudiante se nos mostró una construcción subterránea de grandes dimensiones y excelente calidad atribuida a una antigua cervecería. Se trata de dos bóvedas de mampostería de ladrillos sostenida por paredes de piedra bien trabajada, unidas por un arco portante al centro, que miden en total 21.60 metros de largo por 5.15 de ancho, medidas interiores, con paredes que, en donde pueden ser medidas, alcanzan los 0.60 metros de ancho. La altura de los muros, actual, es de 2.10 metros y la bóveda tiene 2 metros de alto; es evidente que el piso actual, de arena, no es el original, el que debe estar más abajo.

A esta estructura desembocan cuatro canales de ladrillos, una entrada a través de un arco de 2.10 metros de diámetro, una boca de acceso rectangular en la parte alta y es posible, aunque poco probable, que haya otro arco en el muro ahora tapado por escombro y basura. El arco mayor parece tener un piso inclinado que sube hacia el exterior, donde se encuentran restos de dos muros de piedra y un pilar de mampostería, quizás parte de una chimenea, aunque es imposible determinarlo con una visita de esta naturaleza.

Los ladrillos miden 29 y 30 de largo por 15 de ancho y 5 de espesor. El nivel externo original no es visible, y no parece coincidir con el actual.

En forma hipotética en virtud del poco tiempo disponible, consideramos que se trata de una construcción de mitad del siglo XIX, posiblemente y en base a comparaciones con estructuras similares conocidas, fechable hacia 1850-1870.

La función que debió cumplir es difícil de atribuir sin más datos, pero hay dos que son probables: un pozo de desague de una fábrica que usaba líquidos en gran cantidad –por el típico sistema de canales de entrada en la bóveda- o un sótano para mantener la temperatura estable para productos como la cerveza, por lo que el que haya sido parte de una cervecería suena lógico. Sólo con un estudio más detallado será posible responder con mayor precisión.

– Valor patrimonial y potencialidad turística

Esta construcción es de sumo interés patrimonial y de FUERTE ATRACTIVO TURÍSTICO, y a la inversa del túnel de Coceramic no implica inversiones ya que tiene facilidades de entrada y salida (tema: seguridad) y no hay aparentes fisuras en muros ni sobrepeso encima. Con una escalera de bajada y abriendo el arco de salida lateral, y con una limpieza, después de las excavaciones puede ser abierto al turismo.

Se entiende que está dentro de un predio de propiedad privada, pero el estar a un lado del alambrado y de una calle, facilita llegar a un acuerdo de accesibilidad temporal y mantenimiento.

Vista del interior de la cámara subterránea

Vista del interior de la cámara subterránea

Detalle de los arcos como sistema constructivo incluidos en los muros

Detalle de los arcos como sistema constructivo incluidos en los muros

Galería de desagüe hacia el interior de la cámara

Galería de desagüe hacia el interior de la cámara

Construcción conexa a la cámara

Arco portante de ladrillo del interior.

Arco portante de ladrillo del interior.

VII. Otras construcciones visitadas en el Primer Recorrido

Durante nuestro recorrido por la ciudad se nos mostraron, aunque sin tiempo, dos cisternas de aljibes del siglo XIX tardío, una restaurada y abierta al público aunque alterada al hacerle un acceso por un pequeño túnel que llega desde cimientos ubicados a un lado (casa de los Corsiglia en la bajada del Puerto Viejo); otra de igual cronología (cerca de 1880) en una casa particular, y un frente de casa hecho totalmente de piedra que fechamos para la época de la Confederación por sus características italianizantes.

También se visitó la denominada Calera ubicada en Estrada al 600, la que no consideramos que lo haya sido y que merece más atención al respecto. Si bien ya se ha escrito al respecto (ver bibliografía) algunos artículos de divulgación, merece un estudio detenido.

Dos vistas de la construcción de la calle Estrada.

Dos vistas de la construcción de la calle Estrada.

Vista de la construcción en la calle Estrada.

Cisterna del aljibe de Puerto Viejo.

Fachada de piedra de la época de la Confederación de Puerto Viejo

El Puerto Viejo en 1880

Vista de Paraná en 1941, nótese el problema del desague de las superficies superiores hacia el Puerto Viejo

Plano de la ciudad en 1890, el arroyo aun existía y el desnivel producía los desagues hacia ese lado y el Puerto Viejo aun funcionaba.

Plano de Paraná hacia 1960 en que el arroyo ya está desapareciendo aunque su relicto sigue mostrando el Viejo sistema de desagües.

Plano actual de la ciudad en que el antiguo arroyo ha desaparecido, aunque se conserva la topografía y no se ha modificado el movimento de las aguas.

VII. Bibliografía utilizada

Artículos de prensa o internet sin firma

2001, Descubriendo túneles, en www.oni.escuelas.edu.ar/2001/entre-rios/tuneles/sitio/ ubicaciones.htm
2004, Túneles; primera reunión de la comisión de estudio, en El Diario (10 de octubre), pag. 9, Paraná.
2004, Túneles en Paraná: tráfico subterráneo de esclavos, en Weekend, octubre, pag. 18, Buenos Aires.
2004, Los túneles existen pero no los hicieron los jesuitas, en El Diario (9 de noviembre), pag. 3 segunda Sección, Paraná.
2004, Nuevo hallazgo histórico en plaza Primero de Mayo, en Boletín Informativo Municipal no. 954, 13 de noviembre, Paraná.
2005, Mañana llegan los especialistas para estudiar los túneles, en El Diario (18 de mayo), Paraná.
2005, Investigación de túneles, en Uno (18 de mayo), Paraná.
2005, Historia de una casa, arqueología urbana en la capital provincial, en El Diario (19 de mayo), pag. 5, Paraná.
2005, Túneles: se necesitaría una baja inversión para ponerlos a punto, en El Diario (20 de mayo), Paraná.
2005, Rechazaron la idea de que habrían sido construidos por jesuitas, en Análisis (online), 20 de mayo), Paraná

Basterra, José León
1995, Hallan túneles de hace casi tres siglos construidos por los jesuitas en Paraná, en Clarín (6 de abril), Buenos Aires.

Dirección de Cultura
1986, El patrimonio cultural de los entrerrianos; Paraná: patrimonio urbano arqitectónico (vol.I), Dirección de Cultura de Entre Ríos y Consejo de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Entre Ríos, Paraná.

Gianello, Leoncio
1941, Historia de Entre Ríos, Ministerio de Educación, Paraná.

Gutiérrez, Ramón; Alberto de Paula y Graciela Viñuales
1971, La arquitectura de la Confederación Argentina en el litoral fluvial, Universidad Nacional del Nordeste, Resistencia.

Londero, Oscar
2004, Buscan desentrañar el misterio de la red de túneles que hay debajo de Paraná, en Clarín (2 de junio), pags. 30-31, Buenos Aires.

Mernes, Miguel Angel
1991, Entre Ríos, los túneles de Paraná, en Entrevista no. 2, pp. 8-9, Santa Fe.
2002, Los túneles de Paraná, en Al filo de la realidad, Revista Electrónica del Centro de Armonización Integral www.eListas.net/lista/afr
S/f,  Túneles de Paraná, mecanoescrito, Paraná.

Musich, Walter
2002, El mito de los túneles de Paraná, en El Diario, 10 de febrero, Paraná.
2004, Construcciones subterráneas: entre historia y mito, en Análisis (20 de junio), pag. 27, Paraná.

Pérez Colman, César
1936, Historia de Entre Ríos, época colonial, Imprenta de la Provincia, Paraná.
1946, Paraná, 1810-1860: los primeros cincuenta años de la vida nacional, edición del autor, Paraná.

Piloni, Zacarías
1999, Restos de un horno de cal en la calle Estrada: la construcción ratificaría el detalle del Escudo Municipal, El Diario, 12 de septiembre, Paraná.

Reina, Rubén
1973, Paraná, social boundaries in an argentinian city, University of Texas Press, Austin.

Riani, Jorge
2004, La prueba de Mernes o el dibujo imaginado de un artista parisino, en Análisis (6 de agosto), Paraná.
2004, Túneles históricos versus espacios subterráneos: un debate que generó el calor en la fría noche de mitad de año, en Cronista Digital (18 de julio), Paraná.
2005, Dentro de los túneles hay… oscuridad, en Cronista Digital (20 de mayo), Paraná (reproduce nota de la revista Río Bravo de noviembre 2004).

VIII. Agradecimientos

Agradecemos en forma especial al Intendente Municipal Julio R. Solanas; y atodos los que colaboraron con este primer estudio: Carlos Leiva, Daniel Tuma, Julio Ruberto, Gastón Grand, Jorge Riani, Carlos Cerutti, Oscar Londero, Miguel Mernes, Carlos Leiva, Carlos Menu-Marque y Lilia Santiago.

IX. Recomendaciones de acción inmediata

1) Desarrollo de una segunda etapa de estudios que implique excavaciones arqueológicas

2) Estudio de la forma de crear una ONG que pueda recibir de la Municipalidad, para su mantenimiento, estudio y explotación, estas estructuras subterráneas, siempre que se respete la legislación sobre patrimonio cultural vigente

3) Delinear en forma conjunta con dicha institución, el plan de manejo y uso turístico

– 0 –

Apéndice

Adjuntamos tres archivos, dos con las fotografías de dos periódicos de la ciudad entrerriana de Paraná donde se cubre la noticia sobre el tema. El tercer archivo corresponde a un portable PDF con el relevamiento in-sito del túnel de Cocerámic.

El Diario, Domingo 10 de febrero de 2002

Prensa de Paraná

– O –

Relevamiento in-situ del túnel de Cocerámic

Archivo en formato PDF

Share
Esta entrada se publicó en Argentina y está etiquetada con Argentina, arqueólogo, arqueología, arqueología urbana, arqueologia argentina, Coceramic, Entre Rios, excavación de túneles, Guillermo Paez, Historia Argentina, Paraná, Patricia Frazzi, patrimonio cultural, patrimonio entrerriano, Preservación, restauración, sitios arqueológicos, túneles en 1 junio 2005 por Otros autores.

Navegación de entradas

← Alfred P. Maudslay en Oaxaca (1898-1906): una historia olvidada La construcción de la fuente de la Plaza Mayor de Mendoza →

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Daniel Schávelzon

Blog personal para la difusión de mis trabajos en el campo de la arqueología urbana y las publicaciones desarrolladas con diversos proyectos de investigación en el área del patrimonio cultural latinoamericano. Se incluyen libros electrónicos, enlaces de interés, antecedentes académicos y artículos en publicaciones internacionales.

Artículos

  • América Latina
    • Argentina
      • Mendoza
      • Mural de Siqueiros
      • Teatro Colón
    • Bolivia
    • Chile
      • Isla de Pascua
    • Colombia
    • Ecuador
    • México & Guatemala
      • Kaminaljuyú
    • Paraguay
    • Perú
    • Uruguay
  • Documentos
  • Historia de la Arqueología
    • Gordon R. Willey Simposium
  • Libros electrónicos
  • Prensa y difusión
  • Tráfico ilegal de arte

Archivo cronológico

Recomiendo

  • Centro de Arqueología Urbana
  • Patrimonio e Instituto Histórico

Ultimas entradas

  • El pensador de Mesoamérica: el primer objeto (falso) del Museo Peabody de la Universidad de Harvard (1846 – 1866) 15 febrero 2022
  • «El Barrio del Tambor: Arqueología histórica en espacios afro de Paraná. Excavaciones en la capilla de San Miguel Arcángel» 21 julio 2021
  • «Arqueología de la ex Aduana Taylor: excavaciones en Plaza Colón (2018)» 25 febrero 2021
  • «Manual de Arqueología Urbana: técnicas para excavar Buenos Aires» 9 octubre 2020
  • «El árbol de cemento: arquitectura de rocallas en Argentina y América Latina» 26 marzo 2020

Administración

  • Acceder
  • Feed de entradas
  • Feed de comentarios
  • WordPress.org
Desarrollado con WordPress - ©2005-2023 Daniel Schávelzon.